Excélsior
*I. Suspenso. Se esperaba que ayer se diera a conocer al nuevo ministro de la SCJN, quien sustituirá a José Ramón Cossío, pero a falta de consensos entre los grupos parlamentarios del Senado para elegirlo, Martí Batres, presidente de la Mesa Directiva, aplazó discutir y votar el tema en el Pleno y citó a sesión para este jueves. Los coordinadores de las bancadas todavía no alcanzan un acuerdo, pues para elegir al nuevo ministro de la terna del Presidente se necesitan mayoría calificada, lo que de 128 senadores significa un mínimo de 85 en total. Morena en el Senado se inclina por Juan Luis González Alcántara para ocupar la vacante del ministro Cossío. Que ese retraso en la designación no sea otra piedra en el camino. Lo que necesitamos es avanzar.
*II. Una más. Rebeca Clouthier renunció al PAN después de 32 años de militancia en el instituto político en el que su padre, Manuel de Jesús Clouthier del Rincón, Maquío, fue candidato presidencial en 1988. Ella denunció la corrupción y el lucro que comete el partido con la gente necesitada. Proveniente de una familia de lucha, se dijo estar decepcionada del PAN. “Sufrí en carne propia la sustitución de la filosofía humanista del PAN y observar cómo se transformó en veleta, movida por intereses y negocios personales de muchos, me orillan a tomar una dolorosa decisión. Renuncio al Partido Acción Nacional”. Descaro, deslealtad, cinismo y corrupción. Por eso se va. Seguro les dolió.
*III. Apañón. El Consejo General del INE aprobó los cambios que hizo Morena a sus estatutos, por lo que la actual líder, Yeidckol Polevnsky podrá quedarse un año más al frente del partido, y será en noviembre de 2019 cuando termine su cargo. Debido a los buenos resultados que dio el partido en las elecciones de 2018, el inicio de los procesos electorales en cinco entidades, y para fortalecerlo se prorroga el mandato de los órganos internos. Además, se aprobó que el partido estableciera en sus reglamentos que el 50% de su financiamiento público, más de 750 millones de pesos para 2019, se entregue a su Instituto de Formación Política interno, pero se ordenó que el secretario de Finanzas de Morena informe al INE de los ingresos y gastos de ese Instituto, a pesar de que, en los estatutos se le otorga autonomía de gestión. A ver si es cierto qué tan honestos y valientes son.
*IV. Cordialidad republicana. Luego de que se aclaró que el Presupuesto para universidades tuvo un error, que se corregirá, la subsecretaria de Egresos de la dependencia, Victoria Rodríguez Ceja, refirió que por procedimiento corresponde a la Cámara de Diputados determinar el mecanismo para atender el cumplimiento del compromiso presidencial. “Ya estaremos atentos al mecanismo que tengan a bien definir y nosotros estamos abiertos a acompañar, dispuestos a todas las tareas que sean necesarias para que se puedan tomar estas definiciones por parte de la Cámara, que es el órgano competente ahora”, expresó. Mientras tanto, Enrique Graue, rector de la UNAM, y Mario Alberto Rodríguez Casas, director del IPN, se bajan el salario. Eso se llama unidad.
*V. El otro lado del voto. Detrás de los 30 millones de electores que eligieron un cambio en los comicios del 1º de julio, está el dinero que se repartirá a los institutos políticos. A unos días de que finalice 2018, la Comisión de Prerrogativas del INE ya tiene definido cómo será distribuido el financiamiento. Corresponden a Morena 979 millones 113 mil 415 pesos; le sigue Acción Nacional con 900 millones 849 mil 651 pesos y, aunque el PRI fue el que recibió más recursos el año pasado, en 2019 percibirá 849 millones 372 mil 311 pesos. El Partido del Trabajo tendrá 5 millones 205 mil 645 pesos para 2019; 5 millones 564 mil 355 menos que en 2018. El Verde 403 millones 969 mil 400 pesos. Los tiempos cambian. Los recursos, solo de manos.