México, 5 Nov.- Con la publicación de la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos, ya no habrá pensiones para los expresidentes, y ningún funcionario público podrá ganar más que el Jefe del Ejecutivo federal, afirmó el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
Aseguró que el mismo percibirá 60 por ciento menos de lo que obtiene el presidente actual; que no habrá compensaciones, partidas para protocolo ceremonial, ni fueros ni privilegios y “se va a poder juzgar a los expresidentes, me van a poder juzgar a mi como se juzga a cualquier ciudadano”.
Explicó que para la puesta en marcha de los proyectos que planea la próxima administración federal, ya se procesan en el Congreso las modificaciones legales necesarias, y aseguró que será un proceso harmónico y ordenado.
En un mensaje difundido a través de redes sociales, precisó: “Tengo una ambición legítima, quiero ser uno de los mejores presidentes de México, y para eso se requieren los cambios; no más de lo mismo”.
Respecto de las manifestaciones que se anuncian contra la consulta para la construcción del nuevo aeropuerto y la aseveración de una revista política en el sentido de que se encontraría solo y se avizoraba su fracaso, indicó que en el marco de las libertades democráticas, “es pluralidad, es libertad de expresión, no es pensamiento único”.
Adelantó, sin embargo, que ante la crítica y el cuestionamiento no habrá de guardar silencio, sino por el contrario, “no va a ser así, tenemos que debatir de manera respetuosa, pero tiene que haber diálogo circular, tiene que haber libertades plenas y para todos”.
López Obrador llegó poco antes de las 9:00 horas a la casa de Transición, en cuyo exterior le aguardaba Farida Acevedo, del Movimiento Ciudadanos Global Venezuela, pronunciándose contra la invitación a Nicolás Maduro para que asista a la toma de posesión de López Obrador y exhortándo a valorar el impacto que produciría la presencia de “Nicolás Maduro a un acto tan emblemático, importante, como la toma de protesta para el presidente de un país como México, que ha decidido tomar un rumbo hacia el respeto de los derechos humanos”.
