Falla geológica ‘Pátzcuaro-Acambay’ pone en alerta a la CDMX

Google + Pinterest Linkedin Tumblr +

Desde el año pasado la Ciudad de México viene padeciendo una constante de microsismos registrados en la zona poniente, los cuales según expertos de la UNAM se deben a la falla geológica que han denominado “Plateros-Mixcoac”, la cual es responsable de estos pequeños temblores con epicentros en las alcaldías Álvaro Obregón y La Magdalena Contreras, sin embargo, otro desperfecto natural que pone en peligro a la capital del país es la falla geológica “Pátzcuaro-Acambay”, la cual se ubica a tan solo 90 kilómetros al noroeste de la CDMX.

Y es que si bien en esta zona que se ubica entre Michoacán y el Estado de México recientemente no ha registrado movimientos telúricos, en 1912 fue la responsable de un terremoto de magnitud 6.9, el cual provocó afectaciones devastadoras en varias localidades urbanas de la zona y provocó la muerte 149 personas

Hasta la fecha ha sido el epicentro más grande y cercano a la Ciudad de México, pero no muy alejado tomando en cuenta que el terremoto del 19 de septiembre de 2017 estuvo a 120 kilómetros de la entidad.

Uno de sus potenciales riegos, según expertos del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), es que la falla geológica “Pátzcuaro-Acambay” provocaría que debido a su cercanía las ondas sísmicas estén rápidamente en la región metropolitana de la Ciudad de México, por lo que puede ser catastrófico, además alerta que debe tomarse en consideración que en 1912 no había tanta población ni desarrollo urbano, por lo que actualmente las condiciones de vida y asentamientos ante un evento de esta magnitud pueden ser incalculables.

EXPLICAN LA ANOMALÍA

Según el Cenapred, la falla geológica es una grieta o fractura entre dos bloques de la corteza terrestre, a lo largo de la cual se produce un desplazamiento relativo, vertical u horizontal. Refiere que este desperfecto ocurre cuando las rocas de la corteza terrestre han sido sometidas a fuertes tensiones y compresiones tectónicas, más allá de un punto de ruptura.

Mientras que investigadores del Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt), subrayan que esta falla se originó por muchos sismos antiguos formando acantilados o escalones de varios metros llamados escarpes de falla, es por ello que advierte que la “Pátzcuaro-Acambay” es activa y está sujeta a fuerzas tensionales, es decir, como cuando jalamos una liga por ambos extremos.

FUENTE; DIARIO DE MEXICO

Compartir.

Dejar una respuesta