La diputada federal del Partido Acción Nacional por el Estado de México, Laura Angélica Rojas Hernández, propuesta para presidir la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, en relevo de Porfirio Muñoz Ledo no alcanzó la mayoría calificada requerida para asumir el cargo.
Frente a tales condiciones, el Pleno Legislativo de San Lázaro hubo de hacer un nuevo receso para explorar otras vías de solución a la eventual crisis legislativa que se avizora ante la tentativa hasta ahora fallida del partido mayoritario de Morena por conservar la presidencia durante toda la LXIV Legislatura, de acuerdo con la iniciativa original de la diputada María de los Dolores Padierna Luna.
La iniciativa de la legisladora de Morena recién fue sustituida por otra que preveía la continuación de Porfirio Muñoz Ledo al frente de ese órgano de dirección de la Cámara de Diputados para que posteriormente las fuerzas mayoritarias en orden decreciente que no hubieran ocupado el cargo, pudieran hacerlo por un lapso proporcional a su representatividad.
Esta controvertida iniciativa quedó inconclusa luego de que la víspera Muñoz ledo tomara la decisión de retirar su aspiración de proseguir en el cargo para el periodo que recién arrancó, por lo que el pasado lunes se decretó un receso para intentar puentes de entendimiento entre las fracciones.
Reanudada la sesión este miércoles, la propuesta inconclusa reorientada por 5 artículos transitorios propuso a la Asamblea finalmente una nueva fórmula que como presidenta de la Mesa Directiva encabezó Laura Angélica Rojas Hernández en la vicepresidencia, y los diputados Dolores Padierna Luna, de Morena; Ricardo Villarreal García, del PAN y Dulce María Sauri Riancho, del PRI, como vicepresidentes, acompañados por 8 diputados secretarios de diferentes fracciones.
La fórmula, como queda dicho, no alcanzó la mayoría calificada al lograr tan solo 168 votos a favor, 276 en contra y 2 abstenciones por lo que tras abrirse un nuevo receso, se exploran otras posibilidades para destrabar el asunto.
