La primera ministra británica Theresa May señaló hoy en la Cámara de Diputados que dos agentes rusos son los sospechosos del envenenamiento del exespía ruso, Sergei Skripal, y de su hija Yulia con un arma química prohibida.
Dijo que los sujetos pertenecen al servicio de Inteligencia ruso GRU y sólo Rusia tenía un motivo para realizar el ataque en suelo inglés. “Las acciones del GRU son una amenaza para nuestros aliados y para nuestros ciudadanos (…) Reino Unido no está en desacuerdo con el pueblo ruso, pero no podemos permitir acciones como la ocurrida en Salisbury”, afirmó la gobernante.
La fiscalía británica citó a Alexander Petrov y Ruslan Boshirov por intentar asesinar a Skripal y causar daños físicos de gravedad a Yulia Skripal y al policía Nick Bailey. El incidente se registró el pasado mes de marzo en la ciudad inglesa de Salisbury y provocó una crisis diplomática entre Reino Unido y Rusia.
Las autoridades británicas calificaron el ataque como “intento de asesinato” y ordenaron la expulsión de 23 diplomáticos rusos ante la negativa de Moscú de emitir una explicación.
Las autoridades británicas señalan que el exdoble agente ruso Sergei Skripal y su hija fueron envenenados con “novichok”, un agente nervioso producido en laboratorios del gobierno ruso. Ambos fueron descubiertos inconscientes en una banca de la ciudad inglesa de Salisbury el pasado 4 de marzo.
Yulia Skripal estuvo en coma durante 20 días y fue dada de alta en abril, mientras que su padre de 67 años -quien se recupera más lentamente- salió del hospital el pasado 18 de mayo.
Skripal fue un militar ruso condenado en 2006 a trece años de cárcel por “alta traición en forma de espionaje” por colaborar con el servicio de inteligencia británico, MI6.
Skripal reside en Reino Unido desde 2010, tras un intercambio de espías entre los gobiernos ruso y estadunidense. Su hija Yulia visitaba a su padre en Inglaterra cuando sucedió el ataque que desató la crisis diplomática con Rusia.
FUENTE: NOTIMEX, ENLACE INFORMATIVO, 05-09-18.
