Tras la difusión de imágenes relacionadas con la separación de menores de sus padres migrantes, el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores de México, Luis Videgaray Caso, condenó la medida y llamó a las autoridades norteamericanas de alto nivel a reconsiderar la política en este sentido.
En conferencia de prensa, el canciller manifestó el pleno respeto del gobierno mexicano a la soberanía de los Estados Unidos de Norteamérica y no pretende pronunciarse en favor de la migración ilegal en ningún caso; pero tampoco, dijo, puede permanecer indiferente ante una situación que vulnera los derechos humanos de los migrantes y en particular de los menores.
Más allá de consideraciones de carácter jurídico o político, agregó, hizo un exhorto para que se frenen estos procedimientos inhumanos.
Adelantó que el gobierno mexicano hará llegar a las autoridades del vecino país del norte una nota diplomática de rechazo a esta política, requiriéndole adoptar diversas medidas de carácter práctico, entre ellas las de eficientar la coordinación entre agencias de seguridad y salud a fin de mantener un registro concurrente de padres e hijos, que propicie y facilite la reunificación familiar.