El nombre de Pablo Escobar, el narcotraficante más famosos del mundo, sigue resonando por todo el mundo 25 años después de su muerte. Esta vez, el foco de atención es el exjefe de los sicarios del narcotraficante, Jhon Jairo Velásquez Vásquez, conocido como “Popeye”, quien la pasada tarde del viernes fue detenido por las autoridades colombianas acusado de delito de “extorsión” y “concierto para delinquir”, según ha confirmado el alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, a través de su cuenta de Twitter.
El ex miembro del cártel colombiano, había cumplido una pena de 23 años de prisión únicamente por el homicidio del candidato a la presidencia de Colombia, Luis Carlos Galán, a finales de los 80. En aquella época se calcula que bajo las órdenes de Escobar, llegó a asesinar a más de 300 personas. Tras ser excarcelado en 2014, ‘Popeye’ quiso demostrar su rehabilitación convirtiéndose en un fenómeno en Youtube con una cuenta de más de 110.000 seguidores.
Ahora, Vásquez ha vuelto a ser detenido por extorsión y podría enfrentarse a una condena de entre 18 y 20 años de cárcel. Según ha sostenido en una rueda de prensa el comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, el brigadier general Óscar Gómez, ‘Popeye’, “tenía una oficina de cobro y obligaba a ciertas personas a retornar algunos bienes, entre ellos inmuebles y vehículos.”
La detención se ha realizado cuando el exsicario se encontraba en las instalaciones de la Fiscalía en Medellín, a las que había acudido para averiguar si estaba siendo investigado por las supuestas constantes amenazas a los seguidores del candidato presidencial de izquierdas Gustavo Petro a través de Twitter.
Según ha indicado Gómez, las investigaciones se iniciaron en diciembre de 2017 tras la captura del narcotraficante colombiano Juan Carlos Mesa, alias “Tom”, ya que ‘Popeye” se encontraba el día de la detención en la fiesta con el exsicario de Escobar.
En la operación para su detención, ha intervenido tanto la Policía colombiana como el Gobierno estadounidense que, según las autoridades locales ha apoyado las investigaciones que han terminado con la captura del exjefe de sicarios de Pablo Escobar.
El alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez, resaltó el apoyo “fundamental” de Estados Unidos y consideró que con la captura de “Popeye” se envían mensajes “claros y contundentes” a los delincuentes. “No hay futuro a quienes eligen la mafia como camino”, dijo Gutiérrez, y agregó que en Medellín “quien la hace, la paga”.
AGENCIAS, ENLACE INFORMATIVO, 26-05-18.
