Milenio Diario
Que ya se impuso a la minoría
La cancelación del aeropuerto en Texcoco no es, ni por mucho, un tema agotado. Al contrario, es el principio de un gran tema cuyas secuelas iremos sintiendo en el correr del próximo gobierno. Alguien me decía ayer: ¡Ya supéralo…! Hay que mirar al futuro y le respondí: Es justo hacia donde estoy viendo, hacia el futuro. Y es que más allá, y sin superar el impacto de la cancelación de esa obra –que según me dijo José Ángel Gurría, titular de la OCDE, costaría más cancelarla, 120 mil millones de pesos, que terminarla, 100 mil millones– está el mensaje de Andrés Manuel López Obrador que debimos ver con toda claridad: el poder ha vuelto a la Presidencia de la República y aún sin tomar posesión. El lunes lo repitió: la Presidencia volverá a estar al servicio del pueblo, no de una minoría, hasta hace poco rapaz, y que volverá a serlo en cuanto lo necesite. He escuchado atentamente, leído y releído como siempre, la transcripción de sus declaraciones del lunes, cuando en conferencia de prensa confirmó el fin del NAIM, y de ayer, cuando desde sus raíces, en un video denunció la campaña en su contra. Y eso que no se ha subido al templete, esta semana no ha encabezado ningún mitin en la plaza pública. Ha hablado donde no existe la exaltación de la feligresía que calienta a cualquiera. Con el anuncio de la cancelación del NAIM en Texcoco y la aprobación del eje Santa Lucía-Benito Juárez-Toluca está confirmando lo que será su personal estilo de gobernar que solo puede sorprender a los bisoños: SERÁ el pueblo, no los mercados, lo que me encanta pero es inviable. Así, pues, ha comenzado el nuevo régimen, y de que se joda el pueblo a que se jodan los mercados, que se jodan los mercados, que luego éstos, como siempre, joderán al pueblo. Pero ya marcó su territorio.
RETALES 1. MADURO. Cada presidente electo es libre de elegir a sus invitados a la toma de posesión. Pero en el caso de Maduro, los demás también somos libres de protestar por su presencia. Y no es un asunto ideológico. Nadie ha rechazado la visita de Evo Morales;
- COMIDA. Les puedo confirmar que una de las tres mujeres más poderosas, ésta sí, de Europa, Ana Botín, comió la semana pasada en casa de Andrés Manuel, y con su esposa Beatriz. Los presentaron en Santander, cuando AMLO fue a Ampuero, en Cantabria, a conocer el lar de su abuelo, José Obrador Revuelta; y
- IGUALES. Les digo que el poder los hace iguales. Ayer a las 11 de la mañana, Porfirio Muñoz Ledo tuvo que retrasar el inicio de la sesión en San Lázaro porque solo había 224 diputados, no había quórum. Y les expresó su personal mensaje de tristeza al ver más curules vacías que ocupadas: Hemos venido a dignificar el Congreso, no para seguir fingiendo. Y eso que van empezando en la T4.