El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, condenó con contundencia el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo. En su mensaje, calificó el hecho como un “cobarde atentado” y aseguró que fue atendido de inmediato por las autoridades estatales y federales.
Ramírez Bedolla informó que dos personas presuntamente implicadas en el ataque fueron detenidas, y un agresor resultó abatido en el lugar de los hechos. Asimismo, señaló que se aseguró el arma utilizada en el homicidio y que tanto la Guardia Nacional como la Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE) y cuerpos de seguridad estatales ya se encuentran desplegados en el municipio para investigar lo ocurrido y reforzar la vigilancia en la zona.
El gobernador también se comprometió a mantener informada a la ciudadanía sobre los avances de la investigación y enfatizó su disposición de implementar operativos para que el crimen no quede impune.
Este suceso se suma al contexto de inseguridad que enfrenta la entidad, en el que las agresiones a servidores públicos municipales han generado una fuerte reacción en las autoridades para garantizar el Estado de derecho y la seguridad de la población.
